Hallan la talla de un sátiro del siglo II junto a la villa romana de Antequera
Foto: HITO. El alcalde muestra la pequeña cabeza de sátiro. / E. TORO
La cabeza de mármol, de dimensiones reducidas, representa a un ser mitológico Unos jóvenes la encontraron por azar en la Villa Romana de la localidad
LA CABEZA DE SÁTIRO
Hallazgo: Descubierta en la Villa Romana de la Estación (Antequera), en la zona que corresponde al peristilo (patio).
Cronología: Data de la segunda mitad del siglo II de nuestra era.
Material: Está realizada en mármol calcáreo blanco, de grano fino. Posiblemente de origen griego.
Definición: Se trata de una cabeza de mármol, de unos 10 centímetros de alto y 6 de ancho, que representa a un sátiro o fauno (figura mitológica griega, posteriormente asumida por los romanos, con atributos de hombre y de cabra, como orejas puntiagudas, rabo y patas).
Por Carmen Martín, Diario Sur Digital, 23 de febrero de 2005
Uno de los hallazgos más importantes en los últimos tiempos en Antequera ha sido fruto de la fortuna y de un cúmulo de casualidades. La instalación reciente de alumbrado público en las cercanías de la Villa Romana de la Estación y las últimas lluvias tras varios meses de sequía propiciaron un pequeño desprendimiento de tierra en la zona exterior al vallado del yacimiento. Entre esa montaña de arena y restos, un grupo de adolescente halló por casualidad la pasada semana una cabeza de sátiro de la segunda mitad del siglo II después de Cristo. Sin saber qué tenían entre sus manos, el padre de uno de los jóvenes, Francisco Hidalgo Molina, decidió entregarlo al Ayuntamiento.
Pronto comenzaron los trabajos de investigación por parte de los arqueólogos municipales y del catedrático de Arqueología, Pedro Rodríguez Oliva, para datar y catalogar la escultura. Así fue como los expertos determinaron que se trata de una cabeza, de unos diez centímetros de alto por seis de ancho y tallada en mármol calcáreo blanco de origen griego, que representa a un sátiro o fauno -figura mitológica griega que posteriormente fue asumida por los romanos, con atributos de cabra, como orejas puntiagudas, rabo y patas, y de hombre.
Copia de los griegos
Rodríguez Oliva ha concluido que la talla del sátiro «es una de las de mayor belleza de la península». Así lo confirmaron ayer en rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Ricardo Millán, y el arqueólogo municipal, Manuel Romero. Además, Romero explicó que la pieza también destaca por ser «una de las mejores conservadas de todas las que se han encontrado con forma de fauno, una figura muy empleada como elemento decorativo por los romanos entre los siglos I y III».
En este sentido, Rodríguez Oliva ha determinado que se trata de una copia de un modelo helenístico que ha protagonizado hallazgos similares en Murcia o Puente Genil, aunque en peor estado de conservación. La talla del iris y de las pupilas ha sido clave para poder datar la pieza en la segunda mitad del siglo II, cuando cabezas como éstas servían para decorar los peristilos -especie de patio- de una casa romana.
De hecho, la cabeza de sátiro de la Villa Romana de la Estación, que se expondrá en el Museo Municipal de Antequera cuando esté limpia, apareció en el peristilo, donde también se localizó la cabeza de Venus-Afrodita.
La cabeza de fauno se suma a una considerable lista de hallazgos. En la excavación de 1998, se encontró la parte inferior de otra estatuilla de sátiro. También se han localizado una máscara de Melpóneme, una escultura de Eros dormido, otra de Eros cabalgando sobre un animal acuático, un retrato en relieve y un busto de un príncipe de la familia Julio Claudia.
Lo que esconde la villa
Pero los hallazgos arqueológicos podrían triplicarse. Gran parte de la Villa Romana de la Estación, situada al noroeste del casco urbano de Antequera, está aún sin excavar. Aunque se tiene constancia de la existencia de este yacimiento desde el siglo pasado, no fue hasta 1998 cuando, al realizar las obras para la construcción de la circunvalación norte de la ciudad, se puso de manifiesto la importancia arqueológica de la villa, obligando a desviar el trazado de la carretera a su paso por el yacimiento; aunque hoy se sabe que existen restos bajo el vial. Actualmente, la Consejería de Obras Públicas estudia la construcción de un viaducto que salve los restos de una villa cuyas estancias se articulan en torno a un gran peristilo de unos 430 metros cuadrados.
Según han podido averiguar los expertos, la galería estaba pavimentada con mosaicos geométricos y rodeada por un estanque en el que habría plantas, peces y un conjunto escultórico de mármol. Pero lo que esconde la villa es aún una incógnita: «La superficie excavada de este estanque -de 15 metros de largo- no se corresponde apenas con un 40 % del total», constata un informe municipal.
LA VILLA ROMANA DE LA ESTACION.
La villa romana de la Estación (s. I al IV a.d.C.) se encuentra en el término municipal de Antequera, en el límite norte de su casco urbano, junto a la carretera N-331 y la estación de ferrocarril. El yacimiento ocupa la ladera media y baja de un cerro y los restos, que se están estudiando en la actualidad, se ubican entre la cota 480-464 mts. sobre el nivel del mar. Rodean al yacimiento, por el Este, el camino de Quintana y, por el Oeste, el denominado camino de los Sillares.
Estas características le confieren al yacimiento una localización inmejorable, dominando la Vega Antequerana y controlando las principales rutas de comunicación del interior hacia la costa malagueña en la Antigüedad.
A las buenas comunicaciones y a la capacidad productiva del entorno hay que añadir el cumplimiento de los requisitos indispensables de la habitabilidad -amoenitas- que los agrónomos latinos del momento creían necesarios para la ubicación de una villa: Salubridad y agradabilidad del paraje, amplio dominio visual y belleza del paisaje, orientación adecuada y abundancia de agua.
De esta manera resulta fácil comprender la elección de este enclave para la construcción de una villa de carácter semiurbano o una mansión nacida de la mano de un gran propietario - posiblemente un alto dignatario romano -, conjugando, no sólo el hecho de ser un gran centro residencial, sino también un núcleo de explotación agrícola y de control comercial. La villa no estaba situada dentro del casco urbano. En ella abundan y sorprenden la calidad y cantidad de mosaicos, las dimensiones de las habitaciones (posee un pasillo de 26 m. de largo y 5.5 m. de ancho) y el material empleado, placas de mármol purísimo formando figuras, combinando varios colores (opus sectile).
Entre los enseres encontrados, podemos enumerar el retrato en mármol del dueño de la casa, la cabeza de la musa Melphomenes, apliques de bronce y pequeñas esculturas.
Se ha descubierto una fuente, en un patio de columnas con un mosaico geométrico de 13,5 m. de lado, la taza circular de 4,2 m. de diámetro, en cuya corona se sitúa una escultura de Tetis. Esta fuente forma parte de un conjunto de cuatro de las mismas dimensiones, situadas en el centro de un estanque de unos 250 m2.
A finales de octubre (1998) ha finalizado la 1ª fase de la intervención arqueológica, esperando poder reanudar los trabajos a partir de la 2ª quincena de noviembre.
La cabeza de mármol, de dimensiones reducidas, representa a un ser mitológico Unos jóvenes la encontraron por azar en la Villa Romana de la localidad
LA CABEZA DE SÁTIRO
Hallazgo: Descubierta en la Villa Romana de la Estación (Antequera), en la zona que corresponde al peristilo (patio).
Cronología: Data de la segunda mitad del siglo II de nuestra era.
Material: Está realizada en mármol calcáreo blanco, de grano fino. Posiblemente de origen griego.
Definición: Se trata de una cabeza de mármol, de unos 10 centímetros de alto y 6 de ancho, que representa a un sátiro o fauno (figura mitológica griega, posteriormente asumida por los romanos, con atributos de hombre y de cabra, como orejas puntiagudas, rabo y patas).
Por Carmen Martín, Diario Sur Digital, 23 de febrero de 2005
Uno de los hallazgos más importantes en los últimos tiempos en Antequera ha sido fruto de la fortuna y de un cúmulo de casualidades. La instalación reciente de alumbrado público en las cercanías de la Villa Romana de la Estación y las últimas lluvias tras varios meses de sequía propiciaron un pequeño desprendimiento de tierra en la zona exterior al vallado del yacimiento. Entre esa montaña de arena y restos, un grupo de adolescente halló por casualidad la pasada semana una cabeza de sátiro de la segunda mitad del siglo II después de Cristo. Sin saber qué tenían entre sus manos, el padre de uno de los jóvenes, Francisco Hidalgo Molina, decidió entregarlo al Ayuntamiento.
Pronto comenzaron los trabajos de investigación por parte de los arqueólogos municipales y del catedrático de Arqueología, Pedro Rodríguez Oliva, para datar y catalogar la escultura. Así fue como los expertos determinaron que se trata de una cabeza, de unos diez centímetros de alto por seis de ancho y tallada en mármol calcáreo blanco de origen griego, que representa a un sátiro o fauno -figura mitológica griega que posteriormente fue asumida por los romanos, con atributos de cabra, como orejas puntiagudas, rabo y patas, y de hombre.
Copia de los griegos
Rodríguez Oliva ha concluido que la talla del sátiro «es una de las de mayor belleza de la península». Así lo confirmaron ayer en rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Ricardo Millán, y el arqueólogo municipal, Manuel Romero. Además, Romero explicó que la pieza también destaca por ser «una de las mejores conservadas de todas las que se han encontrado con forma de fauno, una figura muy empleada como elemento decorativo por los romanos entre los siglos I y III».
En este sentido, Rodríguez Oliva ha determinado que se trata de una copia de un modelo helenístico que ha protagonizado hallazgos similares en Murcia o Puente Genil, aunque en peor estado de conservación. La talla del iris y de las pupilas ha sido clave para poder datar la pieza en la segunda mitad del siglo II, cuando cabezas como éstas servían para decorar los peristilos -especie de patio- de una casa romana.
De hecho, la cabeza de sátiro de la Villa Romana de la Estación, que se expondrá en el Museo Municipal de Antequera cuando esté limpia, apareció en el peristilo, donde también se localizó la cabeza de Venus-Afrodita.
La cabeza de fauno se suma a una considerable lista de hallazgos. En la excavación de 1998, se encontró la parte inferior de otra estatuilla de sátiro. También se han localizado una máscara de Melpóneme, una escultura de Eros dormido, otra de Eros cabalgando sobre un animal acuático, un retrato en relieve y un busto de un príncipe de la familia Julio Claudia.
Lo que esconde la villa
Pero los hallazgos arqueológicos podrían triplicarse. Gran parte de la Villa Romana de la Estación, situada al noroeste del casco urbano de Antequera, está aún sin excavar. Aunque se tiene constancia de la existencia de este yacimiento desde el siglo pasado, no fue hasta 1998 cuando, al realizar las obras para la construcción de la circunvalación norte de la ciudad, se puso de manifiesto la importancia arqueológica de la villa, obligando a desviar el trazado de la carretera a su paso por el yacimiento; aunque hoy se sabe que existen restos bajo el vial. Actualmente, la Consejería de Obras Públicas estudia la construcción de un viaducto que salve los restos de una villa cuyas estancias se articulan en torno a un gran peristilo de unos 430 metros cuadrados.
Según han podido averiguar los expertos, la galería estaba pavimentada con mosaicos geométricos y rodeada por un estanque en el que habría plantas, peces y un conjunto escultórico de mármol. Pero lo que esconde la villa es aún una incógnita: «La superficie excavada de este estanque -de 15 metros de largo- no se corresponde apenas con un 40 % del total», constata un informe municipal.
LA VILLA ROMANA DE LA ESTACION.
La villa romana de la Estación (s. I al IV a.d.C.) se encuentra en el término municipal de Antequera, en el límite norte de su casco urbano, junto a la carretera N-331 y la estación de ferrocarril. El yacimiento ocupa la ladera media y baja de un cerro y los restos, que se están estudiando en la actualidad, se ubican entre la cota 480-464 mts. sobre el nivel del mar. Rodean al yacimiento, por el Este, el camino de Quintana y, por el Oeste, el denominado camino de los Sillares.
Estas características le confieren al yacimiento una localización inmejorable, dominando la Vega Antequerana y controlando las principales rutas de comunicación del interior hacia la costa malagueña en la Antigüedad.
A las buenas comunicaciones y a la capacidad productiva del entorno hay que añadir el cumplimiento de los requisitos indispensables de la habitabilidad -amoenitas- que los agrónomos latinos del momento creían necesarios para la ubicación de una villa: Salubridad y agradabilidad del paraje, amplio dominio visual y belleza del paisaje, orientación adecuada y abundancia de agua.
De esta manera resulta fácil comprender la elección de este enclave para la construcción de una villa de carácter semiurbano o una mansión nacida de la mano de un gran propietario - posiblemente un alto dignatario romano -, conjugando, no sólo el hecho de ser un gran centro residencial, sino también un núcleo de explotación agrícola y de control comercial. La villa no estaba situada dentro del casco urbano. En ella abundan y sorprenden la calidad y cantidad de mosaicos, las dimensiones de las habitaciones (posee un pasillo de 26 m. de largo y 5.5 m. de ancho) y el material empleado, placas de mármol purísimo formando figuras, combinando varios colores (opus sectile).
Entre los enseres encontrados, podemos enumerar el retrato en mármol del dueño de la casa, la cabeza de la musa Melphomenes, apliques de bronce y pequeñas esculturas.
Se ha descubierto una fuente, en un patio de columnas con un mosaico geométrico de 13,5 m. de lado, la taza circular de 4,2 m. de diámetro, en cuya corona se sitúa una escultura de Tetis. Esta fuente forma parte de un conjunto de cuatro de las mismas dimensiones, situadas en el centro de un estanque de unos 250 m2.
A finales de octubre (1998) ha finalizado la 1ª fase de la intervención arqueológica, esperando poder reanudar los trabajos a partir de la 2ª quincena de noviembre.
3 comentarios
Pedro Carretero -
tal como se public{o en el correspondiente Boletin Oficial de Andaluc{ia, Giasa saco a concurso la excavacion arqueologica del resto de la villa romana de La Estacion, imagino que con idea de hacer el proyectado viaducto.
Dicho concurso era publico y disponia entre otras exigencias la consolidacion de los restos existentes, de los nuevos encontrados y su puesta en valor imagino que para su musealizacion.
El concurso aun no ha sido resuelto de forma oficial, asi que de momento no se a quien se ha concedido, pero os puedo decir que debe salir en breve y que si alguien quiere la documentacion de dicho concuros, aunque ya no sirve de mucho porque los plazo pasaron el febrero, pues se puede poner en contacto conmigo que gustosamente los enviare.
Perdonad por la ortografia pero estoy en un ordenador de ciber y es otro mundo el teclado.
Saludos
Anónimo -
José Ramón Vega -
Saludos.