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Terrae Antiqvae

Minoicos. Museo de Iraklio (Creta)

Fotos y edición de vídeo: José Luis Santos

La civilización minoica

Recibe este nombre, dado por Sir Arthur Evans en honor del mítico rey Minos, la civilización floreciente en Creta desde el año 2000 a.C. Cuyo predominio e influencia en el mundo Egeo son manifiesta, con una evolución en la Edad del Bronce muy distinta y propia. Su situación geográfica y la riqueza de su suelo le proporcionaban pocos recursos minerales, pero en la parte este y centro grandes praderas y mesetas pastorales, olivos, vides, robles, cipreses y en las partes norte y este playas protegidas favorables para el atraque de barcos de todo tipo.

Antes del 2500 a.C. son escasos los restos de metales, salvo la obsidiana de Melos. No obstante desde el 2500 al 2000 la población crece en número y la riqueza gracias a los adelantos técnicos, predominio de herramientas de piedra y arcilla, aun después de la introducción de la metalurgia.

La característica principal de Creta en esta época, según Finley, es la absorción de elementos culturales (y de población) procedentes de Grecia continental, las Cíclades, Asia Menor, Siria y Egipto gracias al comercio dentro de su desarrollo propio y coherente. Imprimieron su cultura cretense a los jarrones y objetos metálicos (puñales de cobre) y ya en el Minoico Antiguo MA empieza a aparecer el embrión de la arquitectura minoica con su estructura aglutinada en forma de celda de panal.

Respecto al origen de la civilización minoica desde el punto de vista etnológico es difícil adscribir a los cretenses minoicos con algún pueblo conocido. Una de las tesis más admitida es que son herederos directos de los habitantes neolíticos de la isla (que llegarían a la misma hacia el 6000 a.C.) y que los pueblos no neolíticos (indoeuropeos o no indoeuropeos) que pudieran haber llegado a la isla no se impusieron, sino que se vieron absorbidos por la cultura cretense sin imponer la suya. Palmer, el eminente lingüista, plantea que la destrucción de los palacios hacia el 1700 a.C. es obra de la penetración en la isla de un pueblo anatolio, los luvitas, lo que explicaría también el cambio de escritura, Lineal A en vez de la jeroglífica, pero a falta del desciframiento del Lineal A, nada es seguro. Si seguimos las noticias de Creta que da Homero en la Odisea, la población cretense era una población mixta conformada por cidonios, eteocretenses y pelasgos, pueblos de los que, aparte del nombre, apenas se sabe nada.

Características sociales, culturales y económicas de la civilización minoica

Los rasgos de esta civilización que le concedieron tal predominio cultural son los siguientes:

En cuanto a la religión no poseen deidades antropomórficas (lo que estaría muy relacionado con los cultos de los neolíticos a las fuerzas de la naturaleza), salvo la Gran Diosa Madre, diosa de la fertilidad también conocida como la Gran Dama del Laberinto, que aparece representada en ocasiones con el vestido típico minoico y serpientes en ambas manos, símbolos ellas también de las fuerzas fértiles de la tierra.

Para el ejercicio de sus cultos poseen pequeños santuarios semisubterráneas, dentro de los palacios en ocasiones, y cuevas próximas al lugar de asentamiento, parece ser que estas cuevas eran la primitiva morada de los primeros habitantes neolíticos de la isla, posteriormente las abandonarían como morada, pero no como santuarios, se han encontrado rituales de la cultura minoica implica la relación del toro (animal de gran carga sexual, erótica y fertilizadora) por noticias de los murales de Cnosos y de la leyenda de Minos y el Minotauro.

En el embalsamamiento de los muertos utilizan la miel al tiempo que en los rituales de los muertos interviene la fermentación como proceso natural de renovación de la vida.

Posee una sólida base económica con una población densa (se calcula que la población de la isla en época de esplendor debía rondar entre 400.000 y medio millón de habitantes) así como una agricultura y ganadería muy productivas (se calcula así mismo que el número de rebaños sólo de ovejas de Cnosos rondaría los 1000).

Así mismo el comercio se veía favorecido por la fabricación y exportación de productos de lujo en oro y plata, cerámicas, poseía una gran flota, provocada por su situación insular, posición estratégica, sus productos manufacturados y su escasez de materias primas metálicas.

Su sociedad presentaba una fuerte especialización: escribas, carpinteros, pastores, agricultores, armeros, escultores, lapidarios, vidrieros, alfareros, orfebres, herreros, curtidores, tejedores, pintores, etc.

Poseían la escritura (tomada de otro pueblo o desarrollada en suelo propio), divisible ésta en tres etapas:
Jeroglífica, Lineal A y Lineal B (este último sistema sólo de época micénica y para anotar ya la lengua griega, es evolución del lineal A, que en opinión de algunos podría anotar el luvita).

Liderazgo espiritual y material de una autoridad palaciega (que parecía recibir el nombre de Minos) que estaba obligada a renovar su mandato cada año mediante un casamiento-rejuvenecimiento con la Gran Diosa Madre representada en la gran sacerdotisa, celebración que sería sin duda de carácter neolítico y vestigio de una sociedad matriarcal.

Cada familia poseía una parcela de tierra que trabajaba para sí mismos y parece que la clase esclava o no existía o lo hacía en una proporción muy pequeña.

La paz reinante puede que sea la característica minoica más peculiar, pues les llevó a no fortificar sus asentamientos, ocupar las llanuras y los lugares abiertos y desprotegidos, no hay que atribuirla a su flota poderosa como hace Evans con su talasocracia, la flota era comercial y no guerrera.

La civilización minoica alcanzó tal esplendor que, gracias a sus contactos comerciales, pudieron exportar su modo de cultura a todo el Egeo, a lo largo del II milenio las Cícladas recibieron paulatinamente una fuerte influencia de Creta sí bien no hay emplazamientos colonizadores, sólo comerciales, y paralelamente en la Grecia continental, donde se produjo un amplio proceso de unos 400 años denominado "minoización de los griegos" (llegados hacia el 2000 a.C.) y que daría lugar a la posterior civilización micénica (1600 a.C.). Después, hacia el 1400 los papeles se invirtieron y serán los griegos micénicos los que darán lugar a la "micenización de Creta".

Los palacios minoicos

El rasgo que más sorprende de la civilización minoica es, sin embargo, el modo de asentamiento de la población entorno a un edificio central, el palacio, un complejo civil al servicio de la ciudad.

Desde que Evans en la frontera entre el siglo XIX y XX descubriera las ruinas del palacio de Cnosos, el mayor de los palacios encontrados, hasta nuestros días el hallazgo, desenterramiento y estudios de poblaciones con palacios se ha visto aumentado en grado sumo, se han encontrados palacios de los que ni siquiera se conoce el nombre, pues en época clásica no existían tales asentamientos y no se tenía consciencia y recuerdo de los mismos, de ahí que hayan recibido nombres actuales, sus nombres son: Cnosos, Zakro, Malia, Festo, Canea o Kania, Hagia Tríada, Gurniá, y poblamientos de Tilisos, Kamilari, Mirtos y Palakaistro.

Todos los palacios se caracterizan por unas peculiaridades que no se encuentran en ninguna otra civilización del mundo y dicen mucho en favor del grado de civilización de los minoicos. Colocación y extensión del palacio orgánicamente a partir de un área central abierta, un patio, como continuación de la forma colectiva de la organización social neolítica.

Frente a otras culturas no es un templo o lugar sagrado el centro del palacio ni del poblado, sino que el templo del palacio, aparte de ser pequeñas dependencias-santuarios, ocupan un lugar marginal dentro del palacio y reproducen y recuerdan cavernas, esto concuerda con el hecho de que los ritos se celebraran en cuevas y es posible que con procesiones.

Los palacios que cuentan con dos y, a veces, tres pisos presentan generalmente un gran número de habitaciones y dependencias de la planta baja a talleres y a almacenes para el grano, el aceite, el vino, etc...

Dotaban al palacio de un aspecto de grandeza mediante tres efectos de ornato: frescos recubriendo las paredes interiores de las dependencias más importantes (casi siempre motivos naturales marinos, o pugilatos o escenas de toros). Escalinatas y revetir los palacios con piedras centelleantes cortadas en losas con escoplos y sierras consiguiendo un magnifico efecto con poco material (sólo los romanos en la Antigüedad consiguieron algo similar al revestir con losas de mármol los edificios más importantes de Roma, como el Coliseo). Finalmente también dotaban a las columnas cierta fascinación con su forma ovalada y la policromía del palacio.

Al mismo tiempo dotaban al palacio de un aire de ligereza mediante la utilización de grandes tragaluces para iluminar las habitaciones, mamparas plegables y correderas de madera y pilares-columnas en vez de tabiques para separar determinadas dependencias, umbrales en las antesalas, varios patios en el palacio, de los que el central solía estar empedrado.

Higiene de los palacios mediante un sistema de eliminación de residuos mediante un alcantarillado, un sistema de drenaje y otro de ventilación para las habitaciones gracias a grandes ventanales y tragaluces.

Por último la sensación que da todo palacio minoico es la de un laberinto y no es de extrañar. Los pasillos que conducen a las dependencias reales y principales tienen forma de zigzag, las escalinatas no son rectas, sino que frecuentemente son en forma de curva con lo que el visitante era conducido a sus dependencia y a las dependencia reales por un camino indirecto dando un rodeo. Al mismo tiempo las dependencia de palacio y las casa de la ciudad se aglomera y agolpan al modo neolítico, recordando en muchos casos los callejones y callejuelas de los poblados árabes.

Posteriormente la idea de laberinto se convirtió en la de trampa desconcertante, si bien en un origen no lo era. La idea de construcción de palacios y asentamientos viene dada por una aversión a la simetría en las fachadas y trazados de los edificios. Laberinto con todo en una denominación de origen indoeuropeo (sufijo en -nth-) que no se sabe si se aplicaba al conjunto del palacio o a una sala donde al parecer se danzaba una compleja danza (llamada del laberinto), parte del ritual de la Gran Diosa Madre entre la luz y las tinieblas (vida y muerte), cuyos pasos estarían dibujados en el suelo marcando la dirección del baile. Indicar que la noción de laberinto y el minotauro parece aplicarse en la Antigüedad sólo al palacio de Minos en Cnosos.

No obstante no todos los palacios pertenecen al mismo período y algunos de ellos fueron reconstruidos dos o tres veces durante el II milenio debido a las catástrofes naturales (terremotos, maremotos y la acción conjunta de ambos como consecuencia del estallido del volcán de la isla de Tera hacia el 1500-1400), esto ha llevado a diferenciar dentro de la cronología cretense y minoica:

I- Periodo prepalaciego: 2600-2000 a.C. (Minoico Antiguo MA II y MAIII)

II- Periodo palaciego 1º: 2000-1700 a.C. (Minoico Medio MM I y MM II), palacios de Cnosos (puede que anterior al 2000), Malia y Festo.

III- Periodo palaciego 2º: 1700-1400 a.C. (Minoico Medio MM III y Minoico Reciente MR I A y MR II B), nuevo palacio de Festos, el de Zakro, Hagia Tríada y Gurniá.

IV- Periodo postpalaciego: 1400-1100 a.C. (Minoico Reciente MR III) de época micénica, el nuevo palacio de Hagia Tríada.

Por el tamaño del palacio y del asentamiento Cnosos debía ser la "capital" del mundo minoico y las demás poblaciones con palacios eran ciudades de segundo orden con unos gobernantes o príncipes posiblemente subordinados al poder del gobernante de Cnosos que también eran, como aquél, jueces y sacerdotes, juntamente con el mantenimiento del monopolio de la metalurgia de los poblamientos al tener los talleres en el propio palacio. Es muy probable que además existieran diseminados por las llanuras de Creta una serie de terratenientes semiindependientes.

La leyenda de Minos, rey del mar

La leyenda más o menos completa, sin entrar en las distintas variantes o versiones, de Minos dice:
Zeus abandonó a Europa en Creta, después de haber engendrado en ella a tres hijos: Minos, Radamantis y Sarpedón. En Creta Europa se casó con Asterio. Los tres hermanos se enamoraron de un joven llamado Mileto y cuando éste prefirió a Sarpedón, Minos expulsó a Mileto de Creta y éste fundó la ciudad de Mileto. A la muerte de Asterio Minos reclamó el trono, dedicó un altar a Poseidón y pidió que saliese del mar un toro; salió un gran toro blanco y Minos ganó el derecho al trono. Al no placerle a Sarpedón, Minos lo expulsó y se exilió en Cilicia, donde se convirtió en rey. Minos casó entonces con Pasífae y Posidón, para vengarse de un cambio en un sacrificio prometido, hizo que Pasífae se enamorara del toro blanco y disfrazada con una vaca de madera construida por Dédalo, engendró del toro al Minotauro. Para ocultar tal afrenta Minos encargó a Dédalo la construcción de un lugar apartado de Cnosos para encerrar al Minotauro y Pasífae. Dédalo construyó el Laberinto. Radamantis se quedó en Creta y le transfirió a su hermano la costumbre de reunirse cada nueve años en una cueva con Zeus y obtener nuevas leyes para su pueblo.

Minos parece ser el título que recibía el gobernante y la dinastía regia de la cultura cretense minoica de Cnosos, personaje que debía realizar funciones administrativas y sacerdotales. De él nos han llegado noticias a través de la mitología y de los filósofos e historiadores que han hablado de su figura. Platón opinaba que Minos era un gobernante muy sabio al tiempo que un gran juez que cada nueve años se reunía con Zeus, los arqueólogos e historiadores modernos parecen haber identificado esta noticia con una ceremonia que se celebraba cada ocho años completos en las que Minos renovaba su mandato como gobernante, pero no sirviendo a Zeus sino a la Gran Diosa Madre minoica, de la cual dependía y a cuyo cargo estaba como sacerdote.

Antes de seguir quiero indicar que la tradición mitológica de Minos confunde en este nombre a todos los gobernantes de Cnosos (pues era su título y de ninguno de ellos se nos ha transmitido el nombre) así como los gobernantes micénicos que, tras invadir la isla, asumieron la regencia de la isla bajo el mismo título que el gobernante micénico, es decir, que se unen tradiciones minoicas y micénicas, al tiempo que las acciones de muchos gobernantes distintos, la idea del servicio de Cnosos a Zeus transmitida por Platón, sería micénica y el servicio a la Gran Diosa Madre, minoica.

Otra noticia anacrónica de su mitología es que se le hace hijastro de Asterio, nieto de Doro, lo que significa que par la mitología Creta era doria, cosa que no sucede hasta el final del II milenio a.C. Al mismo tiempo Téctamo, padre de Asterio, se dice en la mitología que llevó a Creta una mezcla de eolios y pelasgos (incluyendo quizás jonios del Ática), quizá haciendo referencia a los habitantes de la isla allá el s. VIII a.C., compuesta de aqueos, dorios, eolios, pelasgos y cidonios. El reconocimiento del poder de Minos sería la afirmación del poderío dorio en la isla.

Por contra la mitología nos transmite también una rama del linaje de Minos ajena al mundo griego: su madre Europa, hermana entre otros de Cadmo, rey de Tebas, es hija de Agenor, hijo de Libia y Posidón y procedente de Egipto, y de Telefasa o Argíope, procedente de Canaán. La significación de su nombre, "de ancho rostro", es un sinónimo de la luna llena, título de las diosas lunas Deméter Lebadea y Astarté en Sidón (quizá relacionadas con la Gran Diosa Madre minoica, de la que la luna era un símbolo). La violación de Europa por parte de Zeus recogería un ritual en la que la sacerdotisa de la Luna cabalgaba a lomos del toro-Sol. Se ha querido ver una incursión de Creta en Fenicia par explicar este mito.

La noticia del joven Mileto nos da cuenta de la más que probable fundación de Mileto por parte de cretenses (minoicos o micénicos), confirmada además por el hecho de que a Ladé, en Mileto, se la relacione con el cementerio de Asterio.
Que Sarpedón emigrara a Asia Menor, a Caria y Licia, se ha interpretado como el establecimiento de lugares para el comercio de Creta con dichas regiones.

La noticia de la relación de Pasífae con el Minotauro se explica como un rito en el que la Gran Sacerdotisa de la Luna, que llevaba cuernos de vaca (Pasífae), y el rey Minos, con una máscara con cara de Toro celebraban un casamiento ritual bajo una encina. El toro es el animal ritual de Creta, quedan ferescos con escenas de toros (el famoso salto del toro, deporte o rito), era animal de sacrificio y hay estatuillas de bronce.

El Laberinto como ya se ha dicho es el palacio de Cnosos, un conjunto asimétrico e intrincado de habitaciones, antesalas, vestíbulos y corredores en el que un visitante extraño fácilmente se perdía. Para Evans el nombre vendría de labrys , palabra lidia y caria que significa hacha, haciendo referencia a las dobles hachas, signo de la disnastía real minoica de Cnosos. También recoge la idea de un ritual, un mosaico dibujado en el suelo como patrón a seguir en la realización de un baile (como actualmente las danzas "laberínticas" de la Pascua de Resurrección en Rusia y Gales).

No obstante tenemos otras nociones acerca de Minos. Una concepción de Minos como un gobernante sabio hace referencia a los Minos minoicos, mientras que la idea de Minos autárquico es una caracterización derivada de Minos el último gobernador micénico de Cnosos antes de su destrucción, el cual ejerció una cruel dominación para adquirir una riqueza suficientemente grande para extender su poderío más allá de Creta a las Cícladas y quizá a otras islas (¿Chipre?).

Heródoto nos transmitieron al mismo tiempo dos ideas acerca del poder de Minos, una, su poderosa flota (la comercial de los minoicos) y otra, el carácter guerrero de la misma (obra de los Minos micénicos), esta idea fue llevada más lejos por Evans cuando desenterró Cnosos, invistió a Minos como el dueño y señor del Egeo bajo el ejercicio de su talasocracia, un reinado del miedo y un control del mar que Homero en la Odisea XI califica de despótico. De nuevo se mezclan el Minos minoico y el micénico, los gobernantes minoicos establecieron en todo el Egeo establecimientos comerciales en las costas, sin llegar a colonizar las regiones donde establecían dichos enclaves, comercialmente hablando sí dominaban el Egeo y tenían una "talasocracia comercial" dentro y fuera del Egeo, al tiempo que nunca usaron las armas para nada y la paz era la nota dominante de su civilización, por su parte, los Minos micénicos sí establecieron pequeñas colonias en el Egeo y además ejercieron una dominación despótica basando su poder en la guerra, de aquí la idea de talasocracia despótica.

Las colonias que Tucídides afirma que Minos creó en el Egeo hay que considerarlas como misiones comerciales o diplomáticas enviadas por la Creta minoica para garantizar la buena voluntad y la ayuda de y a los isleños, el ejemplo más característico que se haya descubierto arqueológicamente hasta ahora es Akrotiri en la isla de Tera.

Ritos relacionados con Minos

Al mito de Minos se asocian muchos más, el de sus hijos, el de Pasífae, el de Sarpedón, el de Radamantis, pero creo que dos son los más significativos, el de Dédalo y el de Teseo y Ariadna.

El mito de Dédalo

Dédalo pertenece a la familia real de Atenas, descediente de Erecteo y se caracterizaba por ser un herrero admirable y ser un hombre de ingenio sin igual. Huyó de Atenas por asesinar a su sobrino, otro inventor que le superó al descubrir la sierra. Al llegar a la Creta de Minos trabajó a su servicio, gozando de su favor en paz. Tras el asunto de Pasífae y el Minotauro, Minos lo encerró en el Laberinto por él mismo construído junto con su hijo Ícaro. Para huir del laberinto ideó la construcción de alas con cera y plumas para el y su hijo; éste pereció por acercarse demasiado al sol y derretir el sol la cera, otra versión dice que lo hizo con un barco que le prestó Pasífae y se refugió en Sicilia y que Ícaro cayó al mar, otra más dice que inventó las velas para la navegación y así huyó. Minos salió a buscarlo y Sicilia dicen que mató a Minos mientras se bañaba con pez o agua hirviendo.

Su mito también presenta acronismos. Dédalo, Talos y Hefesto parecen ser títulos de un mismo personaje mítico. El mito de Dédalo y Talos y el de Dédalo e Ícaro parecen mbinar el ritual de quemar al sustituto del rey solar, que se había puesto alas de águila, en la hoguera de primavera con el rito de arrojar un fármaco con alas de perdiz.

La huída del laberinto se entiende como la huída del piso del mosaico con la danza del laberinto, pero la huída a Sicilia se entiende como la huída de los forjadores de bronce nativos de Creta a Cumas, Sicilia y Cerdeña como consecuencias de las invasiones micénicas y dorias.

Aunque Dédalo consta como ateniense por un demo que lleva su nombre, las artes dedálicas fueron importadas de Creta a Atenas. A él se achacan la invención de las velas de los barcos, lo que permitió una mayor velocidad de éstos (y por ello Minos no lo pudo alcanzar en el mar) o al menos inventó algún artilugio que dotaba de mayor velocidad a los barcos.

Teseo y Ariadna

Minos ordenó que los atenienses enviaran siete muchachos y siete muchachas cada nueve años a laberinto de Creta, donde esperaba el Minotauro para devorarlos. A Teseo le tocó ir por sorteo o el propio Minos lo eligió en Atenas. Al llegar a Creta, Ariadna, hija de Mino, se enamoró de él y le ofreció el modo de escapar del laberinto, un ovillo de hilo mágico y las instrucciones acerca ce cómo entrar y salir del laberinto, abrir la puerta de entrada y atar al dintel el hilo que se irá desenredándose conforme avance, luego, una vez muerto el Minoturo, sólo hay que recorrer el camino inverso. Hecho esto condujo a puerto a todo el grupo ateniense y llevó consigo a Ariadna a la que abandonó en Naxos.

Grecia comenzó a minoizarse desde el XVIII a.C. a partir de los lazos comerciales impuestos por Creta. El mito parece ser una rebelión de los atenienses contra los cretenses, construcción de una flota, rebelión y saqueo de Cnosos y un tratado de paz creto-ateniense (casamiento entre Teseo y Ariadna), esto debió de producirse en época micénica y no minoica. El tributo de los jóvenes atenienses al Minotauro era exigido a Atenas y al matar Teseo al animal o vencer en la lucha a Minos (cuyo símbolo era el toro) libera a los atenienses del tributo. Es posible que en alguna época (minoica o micénica) hubiera sacrificios humanos en Creta.

La Edad de Bronce en el Egeo

La transición del Neolítico a la Edad de Bronce

Después del 6000 a.C. los recolectores de alimentos que vivían en cuevas siguieron una transición hacia una forma de vida basada en la agricultura. De este período se conserva un asentamiento en Cnosos de principios de la época Neolítica, asentamiento que perduró hasta época cretense minoica, éste nos revela que paulatinamente se fueron aglomerando casas de una única habitación con forma rectangular así como tipos de cosechas y ganados mediterráneos y una técnica agrícola que nos hace sospechar que el origen de esta población neolítica cretense está en Asia Menor. Asentamientos neolíticos de este tipo se encuentran en época neolítica hacia el 5500 a.C. en la Argólide, Tesalia y evidentemente en Asia Menor (algunos de fecha anterior al 6000 a.C.).

Es estos asentamientos es detectable el comercio -muy incipiente- y la fabricación-artesanía con muy rudimentarios métodos y resultados, su cerámica abarca desde grandes jarras de almacenamiento hasta objetos diminutos, figurillas y armamentos, su culto más importante se dedicaba a una diosa tierra, la Gran Madre, símbolo de fertilidad para las mujeres, animales y cosechas típico de las sociedades neolíticas, este culto era general entre las primeras comunidades agrícolas de Europa y Asia occidental y se mantiene casi con toda seguridad en la civilización minoica, hasta la llegada de los micénicos. Al parecer, este culto es reflejo y responde a una sociedad matriarcal y, como me han explicado recientemente, el matriarcado era una sociedad agrícola donde el hombre se dedicaba en un principio a la caza, mientras la mujer permanecía en casa cuidando y cultivando la casa, al conseguir más alimentos que el hombre con la caza, la mujer ocupó un papel primordial en la sociedad, el matriarcado, sus sustitución por el patriarcado, ya en época neolítica reciente y en la Edad del Bronce, se debe a que al aparecer nuevas herramientas más pesadas para la agricultura, la mujer ya no pudo manejarlas y sí el hombre, con lo que éste sustituyó a aquélla.

La agricultura neolítica del Egeo se caracteriza por una progresiva diversificación de los cultivos típicos del Mediterráneo: vid, cereal, olivo, legumbres y frutos secos, sus herramientas eran toscas: piedras labradas, hueso afilado y la obsidiana como constante. Juntamente aparecía ya la especialización de los artesanos, con lo que surgen carpinteros, herreros, tejedores de cestas, etc... Con ello comenzaron también las distinciones sociales y construyeron asentamientos fortificados hacia el 4500 a.C. (para unos síntomas de miedo ante la aparición de un nuevo pueblo, los indoeuropeos). A partir de esta época aparece el mégaron como casa propia del gobernante. Estos son los cambios del Neolítico.

Para Cotterell y otros historiadores parece ser que al final de la etapa del Neolítico se produce la afluencia de pueblos, que no tuvo por qué ser violenta, y que se produjo la mezcla de pueblos autóctonos con la de los nuevos intrusos procedentes de Anatolia y los Balcanes, ello justificaría los cambios de este momento y el que no haya destrucciones masivas fruto de una invasión externa.

Para las Cícladas la situación es un tanto distinta, ya que aparecen los primeros poblados hacia el 4200-3700 a.C. con una mayor aportación alimenticia del pescado y menor del ganado, si bien no denotan tanto avance como los poblados del continente o Creta hasta el 3000 a.C. (posiblemente, y es una conjetura, porque apenas tendrían una población neolítica previa y serían una mezcla de neolíticos (no indoeuropeos) y nuevos pobladores no autóctonos provenientes del continente (posiblemente sí indoeuropeos, pero no griegos) los que habitaron las islas por primera vez de un modo sedentario).

La Edad del Bronce

El año 3000 a.C. se toma como fecha inicial del fenómeno que supuso el advenimiento de la Edad de Bronce, al tiempo que el desplazamiento de población hacia el sur (al parecer indoeuropeos también, pero tampoco griegos) y una mayor prosperidad.

La Edad del Bronce no supone una unificación metódica e inmediata del nacimiento de la metalurgia, en los primeros momentos los objetos de oro, plata, cobre y bronce suelen ser armas o dedicados a funciones religiosas y decorativos, el metal comenzó su camino en la cuenca del Egeo como material de lujo y no será en el tránsito del III al II milenio cuando el metal vea incrementado su uso cuantitativamente así como en la escala de utilidad cotidiana en la producción como elemento de primer orden. La causa de ello se achaca a la pobreza de metales del Egeo, se exportaba estaño, cobre y hierro y se desarrollaron las rutas del metal que hicieron próspera a la primitiva Troya II como encrucijada y cabeza de puente entre el Danubio, Asia Menor y el Egeo.

Salvo por la Arqueología, los acontecimientos de la prehistoria del Egeo son escasos y son conocidos sólo gracias a los mitos y tradiciones posteriores.

Creta sobre todo y en menor medida Grecia central, el Peloponeso y las Cícladas comienzan a emplear la nueva tecnología del metal. Se consolida la agricultura plenamente mediterránea así como el maíz y la ganadería, el aceite se convierte en producto de uso corriente tanto en alimentación como en ungüentos, en iluminación y usos industriales posteriormente, se introdujo en más regiones de Grecia el cereal y las legumbres, con lo que se incrementó la población por al mejora de la alimentación, sobre todo en Creta y Mesenia, donde el aumento puede catalogarse de espectacular.
Se incrementa asimismo el comercio y la especialización. La indoeuropeización de Grecia está completada. La Edad del Bronce duró desde el 3000 al 1100 a.C. aprox. en la cuenca del Egeo, divisible en dos fases, una de consolidación hasta el 2000/1800 y una segunda fase de eclosión de las grandes civilizaciones del Mediterráneo, la civilización minoica en Creta y la micénica en el continente.

Sin embargo la Edad del bronce no es homogénea para toda la cuenca del Egeo, mientras que el esplendor de Micenas es posterior al de Creta, paralelamente nos encontramos con un creciente militarismo en el Grecia continental y las Cícladas con fortificaciones de los asentamientos (asentamientos establecidos además en lugares estratégicos y bien protegidos por naturaleza) y la concentración de la riqueza en manos de unos pocos príncipes, frente a Creta que nunca tuvo fortificaciones para sus asentamientos (que además se encontraban en medio de llanuras en campo abierto y sin ocupar lugares estratégicos o con defensas naturales) hasta que cayó bajo la esfera micénica. Esto se viene explicando por el hecho de que en el continente y en las Cícladas la población no era la autóctona del Neolítico, mientras que en Creta sí era la misma, o al menos no se había visto sometida por completo a un pueblo posterior (en todo caso otro pueblo se habría fundido con ellos como componente en igualdad de condiciones o sometido).

Esto se puede comparar en los planos de dos asentamientos prototípicos de la edad del bronce, uno del continente -Chalandriani- y otro de Creta -Vasiliki-. Chalandriani presenta una línea de formada por seis torres semicirculares que sobresalían de una gruesa muralla de piedra; Vasiliki presenta la típica aglomeración de casas del Neolítico sin un muro que delimitase el asentamiento.

Hacia el 2100 se ha querido ver la llegada de un pueblo al que se ha denominado minios (reciben el nombre porque el descubrimiento de la llamada cerámica minia se hizo en Orcómenos, cuyo rey mítico era Minias), se caracterizan por una cerámica de superficie gris bruñida que imita las vasijas de metal, alfarería hallada tanto en Grecia como en el Noroeste de Asia Menor. Se les ha identificado con los luvitas, indoeuropeos del tronco anatolio y a ellos se les achacaría los topónimos con sufijos en -(s)s- y -nth-, la cerámica gris y el mégaron como nuevo tipo de construcción. Esta tesis es bastante discutida, pero tampoco ha sido desechada por completo (¿quizá los minios fueran los originarios griegos?).

Fueran quienes fueran (minios o los griegos probablemente) los que atacaron Grecia continental hacia el 2100 a.C. provocaron una interrupción en el avance de la cultural en el aspecto material en la Grecia continental y Cicládica, eran bárbaros y atrasados culturalmente, parecen haber salido hace poco del Neolítico y se incorporaron a la Edad del bronce en época muy tardía, invadieron Grecia desde el norte por los Balcanes (quizá su morada originaria) lo que originaría su bajo nivel cultural por ser montañeses. No obstante durante bastantes decenios y siglos se dedicaron a absorber la cultura superior del pueblo donde se asentaron para en el siglo XVI-XV a.C. dar lugar al nacimiento de la civilización micénica. Estos nuevos pobladores indoeuropeos no llegaron a Creta hasta época micénica y por tanto con un nivel cultural mayor.

La llegada de los indoeuropeos a Grecia

La llegada de distintas estirpes indoeuropeas a Europa pertenece a una de las etapas que se engloban todavía en ese término que conocemos como prehistoria, esta etapa aporta escasos conocimientos acerca de la procedencia, fase y momento de aparición de los indoeuropeos, en nuestro caso en Grecia. No obstante el caso de Grecia ha de considerarse como privilegiado por la pronta aparición de la escritura (Lineal B en el s. XIV y alfabetos en el s. VIII a.C.). A ello habrá que añadir el día que se descifren los documentos en Lineal A de los s. XX-XV a.C. aproximadamente.

La leyenda de los griegos

Hesíodo es el primer escritor que nos habla acerca del nombre de los griegos, su procedencia y sus estirpes, nos dice que los griegos procedían de las regiones actulamente conocidas como los Balcanes, al norte de la Grecia clásica, precisamente del Épiro y también de Tesalia, allí habitaba Helén, que da nombre a todos los griegos, helenos. Helén tuvo tres hijos: Juto, Eolo y Doro y un nieto, hijo de Juto, llamado Ión, los tres últimos dan nombre a las tres estirpes griegas caracterizadas individualmente por sus dialectos: jonios, eolios y dorios (para el arcadio-chipriota no hay filiación alguna en Hesíodo).

Kretschmer, a principios de siglo, llevó más allá el mito de Helén y enunció una de las tesis tradicionales de la historia de los griegos: atendiendo a las tres estirpes adujo lo que podríamos llamar helenización escalonada de la Hélade en tres migraciones sucesivas, los jonios lo harían hacia el 2000-1900 a.C., los eolios o aqueos (para recoger aquí a arcadio-chipriotas) hacia el 1600 y los dorios hacia el 1200, con ello se equiparaba estirpe, dialecto y migración.

Cuando Kretschmer hizo esta teoría no estaba descifrado el micénico y Micenas comenzaba a ser explotada arqueológicamente por Schliemann. El desciframiento del Lineal B ha permitido entrever, según el parecer general, que la mayoría de los rasgos dialectales son posteriores al micénico, es decir, que la diferenciación dialectal tal y como la conocemos de jonio, eolio y dorio es posterior al 1200 a.C., lo que conlleva la caída de la tesis arriba enunciada, así como la teoría de las tesis las migraciones; actualmente las migraciones se reducen al mínimo (corriente anti-migracionista), sí hay movimientos de pueblos constantes, pero no oleadas de migraciones masivas que comporten cambios culturales.

Por otro lado que los griegos son un pueblo indoeuropeo está fuera de toda duda, si bien no voy a demostrarlo, pues ya lo está lingüísticamente en los estudios de gramática. Sin embargo, ni son los habitantes autóctonos de Grecia ni siquiera los primeros indoeuropeos que llegaron a estos lugares: no son la población neolítica que allá el 7000 a.C. habitaba Grecia, sino que llegaron a ella hacia el 2000 a.C. en plena Edad del Bronce.

El final del III milenio se asocia arqueológicamente con una fuerte destrucción en la Argólide y el Ática, marcada por el incendio de los asentamientos existentes, estas destrucciones son también visibles en Troya II, en el sur de Anatolia (en Beicesultán) e incluso Palestina. Tales destrucciones suponen una ruptura, ya que hay cambios en todos los órdenes. Se suelen asociar a la llegada de dos pueblos inmigrantes de forma paralela, hablantes unos de una forma primitiva de griego para Grecia y hablantes otros de lenguas anatolias (luvita, hetita y palaíta; el imperio hetita parece nacer hacia el siglo XVIII a.C.).

La concepción de una raza común indoeuropea con temperamento, costumbres e instituciones específicas, que fueron barriendo pueblos y ocupando países, es muy romántica y posiblemente errónea. Los indoeuropeos se fueron asentando poco a poco y se fueron fundiendo con las poblaciones con las que topaban con mayor o menor preponderancia, lo que les dio su ulterior configuración especial e independiente, los griegos indoeuropeos se hicieron griegos en Grecia. Para Finley las dos características que a su modo de ver definen a los griegos son la cerámica minia y los enterramientos de cistas.
Los propios griegos nos han dejado constancia de que hubo antes otros moradores del futuro suelo heleno, gentes a los que denominaban de modos muy diversos, había pelasgos, tírsenos, léleges, carios y eteocretenses. De los carios sabemos que son de origen anatolio y su lengua se emparenta con el luvita, hetita y en menor medida con el palaíta, misio y lidio, los tírsenos se relacionan con los etruscos (Mar Tirreno) y habitaron en la isla de Tasos y anteriormente en el Ática, los pelasgos habitaban al parecer por gran parte del territorio heleno y en época de Tucídides habitaban parte de la península Calcídica, hablando su propia lengua, los eteocretenses habitaban en Creta y se piensa que eran descedientes de los originarios cretenses o miceno-cretenses, de los léleges no tengo nada que contar.

La Lingüística y la prehistoria de Grecia

En medio de la gran confusión que presentan estos pueblos pregriegos, lingüistas e indoeuropeístas de gran talla han estudiado el vocabulario no griego del griego, es decir, términos de sustrato y adstrato que hay en la lengua griega, centrándose sobre todo en la toponimia, para aclararnos el espeso y complejo panorama que se nos ofrece.

Se basan en el estudio comparativo de sufijos de diversa índole: -(s)s-: Parnassos, -nth-: Korinthos, -n-: Athenai, -m-: Pergamon, -mn-: Lemnos, -l-: Astale, -r-: Epidauro y -th-: Kanethos; junto a ellos estudian también términos no griegos tomados como préstamos en época prealfabética como: erebinthos sukon leirion rodon minthos kyparissos Yakinthos Mermex oinos molybdos Thalassa narkissos daphne origanon Thalamos katharsis, etc. Detectados estos términos y otros se han enunciado por ahora cuatro posibles lenguas de sustrato o adstrato para el griego; estos son sus resultados:
Sustrato anatolio: parecer ser cario (cf. supra) y por tanto indoeuropeo del grupo anatolio, como expuso Gidin, por equivalencias Pernassas/ Parnassos, Petassas/ Pedasoss y sufijos -nth-: Irhandas, -n-: Pehhunas, -m-: Dukkamas, -l-: Imrallas.

Sustrato denominado pelásgico (nombre dado por Georgiev sin que realmente sepamos si correspondía o no a la lengua hablada por los pelasgos), este substrato representaría una lengua indoeuropea no conocida y en un principio no relacionable con ninguna otra lengua indoeuropea conocida caracterizada por: disimilación de aspiradas como el griego, rotación consonántica como el armenio (*gh> g) vocalización de sonantes como el germánico (*r„> ur); por esta lengua se explican palabras indoeuropeas como *bhrgh> pyrgon (germánico burg, celta briga), *dhmbh> tymbos (griego taphos) y palabras como phylax tyrsis sitos, dobletes pythmen/ pyndax **bhndh piaros/ phiaros sus/hys teramnon/ therapne,
Sustrato griego-psi (nombre convencional dado por W. Merlingen a la lengua indoeuropea no conocida que detectó y caracterizada por que *p> /ps/ ), la lengua posee estas peculiaridades: lengua centum con tratamiento labial de las labiovelares, rotación consonántica especial (*p, t, k> ps, s, ks, *b, d, g> ph, th, kh y *ph, th, kh> b, d, g), disimilación de aspiradas antes de la rotación consonántica, así se explican palabras como *dewos> Theos, *kanth> Janthos (latín candidus), oxys y dobletes como anthropos/andros.

Sustrato pelástico (nombre convencional dado por Budimir a una lengua con afinidades con el eslavo y que explicaría dobletes como thermos/ sarmos *gwermos y etimologías como sergos (latín cervus), sería una lengua satem, no confundir con el pelásgico antes enunciado.

Todos estos sustratos que se han detectado son indoeuropeos y anteriores al griego en cuanto a antigüedad en la zona. Ello nos lleva a pensar que los griegos en efecto no fueron los primeros indoeuropeos que arribaron a la península Balcánica, no obstante, salvo el cario, ninguno de ellos es atribuíble a un pueblo conocido. Los griegos sí consideraban a los carios como habitantes primitivos de la Hélade, a los demás (léleges, tírsenos, eteocretenses y pelasgos) también, pero no son identificables como pueblo real lingüísticamente, al tiempo que la adscripción de los etruscos (y por tanto los tírsenos) como indoeuropeos se pone muy en duda.

La Arqueología y la prehistoria de Grecia

Frente a esta aportación lingüística a la prehistoria de Grecia, tenemos la aportación arqueológica, que es la que aporta datos no definitivos, pero sí suficientemente precisos y determinantes como para trazar una posible prehistoria para Grecia.

La cultura de los Kurganes

La teoría global de la extensión de pueblos indoeuropeos por Europa y Asia (y, por tanto, por Grecia) es la de la arqueóloga lituana Marija Gimbutas, enunciada entre los años 60 y 70. Para ella el primer rasgo definitorio de la "cultura indoeuropea" es lo que ella llama kurganes (palabra eslava que designa tumbas, aplicada ésta a unas tumbas enterradas y cubiertas que forman un montículo), pues bien, situado el punto de origen de los pueblos indoeuropeos en el sur de las estepas de la actual Rusia, Bielorrusia y Ucrania, las gentes de estas tumbas se fueron extendiendo paulatinamente en diferentes oleadas de migraciones.

La llegada de primeras poblaciones indoeuropeas al Egeo y a los Balcanes se produce hacia el 3000-2800 a.C., su vida es seminómada y vivían en casas semisubterráneas y de estructura muy sencilla; sin embargo, de éstos no queda nombre que los identifique (concuerda con lo antes explicado), los pueblos indoeuropeos que se pueden identificar con hablantes de lenguas históricas conocidas no aparecerán en los escenarios del Egeo (y de Italia y Centroeuropa) hasta el final del III milenio (los griegos en este caso concuerdan también con la idea de que llegaron hacia el 2000 a territorio egeo. Al mismo tiempo el Egeo recibiría población indoeuropea no desde el Norte, sino desde el Este, desde Anatolia, como lo demuestra la presencia del cario (y para algunos otros también del luvita) en futuro territorio griego.

Las oleadas de avance

Renfrew supone una visión distinta de la indoeuropeización de Europa y Grecia, para él los indoeuropeos provendrían de la zona llamada Creciente Fértil (en la zona cercana a Mesopotamia, en los ríos Tigris y Éufrates), el mecanismo de migración es lo que él denomina oleada de avance, basada ésta en la agricultura: una vez descubierta la agricultura y sedentarizado el hombre, con la aplicación de las nuevas tecnologías de la agricultura, el aumento de la producción y el aumento subsiguiente de la población, se iba haciendo más necesaria la búsqueda de nuevos territorios, entonces parte de la población, los más jóvenes, iban a buscarlos a una distancia muy próxima para abastecer más población; se creaba un nuevo poblado y el ciclo se volvía a reproducir una generación más tarde, así durante milenios. Expuesto esto Renfrew indica que estas oleadas de avance, que no implican destrucciones ni guerra, dieron lugar a que desde el 6000 hasta el 3500 a.C., toda Europa y parte de Asia quedara indoeuropeizada. Ello no quita que después, dentro de los propios pueblos indoeuropeos ya establecidos se produjeran invasiones o migraciones en época posterior a causa del clima o problemas con las cosechas. El caso de Grecia sería un tanto peculiar, ya que en una primera época recibiría población indoeuropea desde Anatolia y después desde el Norte a través de los Balcanes.

Hay autores que actualmente han intentado conciliar la teoría de Gimbutas y Renfrew, pues en algunos puntos son muy parecidas.

1 comentario

Luciano Cassarino -

Muy buen informe,gracias, me encantaria saber de quien es la musica que es excelente tambien.